miércoles, 23 de marzo de 2011

PARA MOTIVAR EL ESTUDIO


El Estudio como actividad habitual y automotivada, es una de las metas que todo sistema educativo persigue en cualquier nivel. Lograr que sea el propio alumno el director de sus tiempos, intereses y motivación en su tarea investigativa es un logro preciado por todo docente pues ello dará al estrudiante la suficiente autonomìa de vuelo por los inmensos cielos del conocimiento.

Aqui un interesante artículo de euroresidentees.com

Formas motivar a los estudiantes
  1. Satisfacer las necesidades y motivos de los estudiantes. Los estudiantes aprenden mejor cuando tienen incentivos para satisfacer sus propios motivos para para aprender. En este sentido puede ser útil que el profesor intente identificar las necesidades de los estudiantes tanto aquellas de las que estos son conscientes como de las que no... Imaginemos que antes de impartir un curso de matemáticas, física, música, etc. el profesor dedicara algún tiempo a relacionar el valor de este aprendizaje conectándolo con necesidades y deseos de los estudiantes; el incentivo para aprender sería mucho mayor.

  2. Hacer que los estudiantes sean participantes activos a la hora de aprender. Estudiantes pueden aprender haciendo, construyendo, escribiendo, diseñando, creando, resolviendo... La pasivividad perjudica la motivación y la curiosidad de los estudiantes. Haga preguntas... Anime a los estudiantes a sugerir aproximaciones a un problema o a adivinar los resultados de un experimento...

  3. Pedir a los estudiantes que analicen lo que hace una clase sea más o menos. motivadora. Sería algo así como aprovechar "los puntos fuertes y débiles" de la materia y del profesor para que este pueda introducir cambios y apovechar todas sus potencialidades. Los estudiantes pueden responder cosas como: "el entusiasmo del profesor, la relevancia y nivel dificultad del material, la organización del curso, el grado de participación activa de los estudiantes, la variedad, la relación entre profesor y estudiantes, el uso apropiado, concreto y inteligible de lo ejemplos y decenas de cosas más..."

  4. Mantener expectativas altas, pero realistas, sobre sus estudiantes. Al parecer según algunas investigaciones las expectativas del profesor tienen un poderoso efecto en el comportamiento de los estudiantes. Se trata de que el profesor mantega expectativas realistas a la hora dedesarrollar su trabajo, hacer presentaciones, dirigir los debates, y hacer exámenes; y al mismo tiempo dé a los estudiantes oportunidades para tener éxito. Esa combinación puede funcionar siempre que, según los estudiantes, se dé un equilibrio realista.

  5. Ayudar a los estudiantes a establecer sus propios objetivos. Ayudar a los estudiantes a evaluar sus progresos, animando o criticando su trabajo, analizando sus esfuerzos, sus debilidades... Quizás en este tema lo más importante es animar a los estudiantes a centrarse en un proceso para mejorar continuadamente, no sólo en una calificación o en un examen.

  6. Comunicar a los estudiantes las exigencias de la asignatura para aprobarla. Es positivo establecer con claridad lo que se le exige a los alumnos para poder superar la asignatura. Incluso ser muy cuidadoso con el lenguaje. Por ejemplo, en vez de decir "vas muy atrasado" habría que decir a los estudiantes: "esta es la forma de ir al día.. ¿puedo ayudarte?".

  7. Fortalecer la automotivación de los estudiantes. Se deben evitar mensajes que como "exijo", "debes", "deberías" y sustituirlos por "creo que encontrarás.." "estaría interesado en conocer tu respuesta". La necesidad de lograr la automotivación y la autoestima de los alumnos debe estar siempre muy presente en la mente del profesor.

  8. Evitar crear competencia entre los estudiantes. La competencia produce ansiedad, lo cual interfiere de forma negativa con el aprendizaje. Es positivo reducir la tendencia de los estudiantes a compararse con otros estudiantes.

  9. Ser estusiasta con su asignatura. El entusiasmo del profesor con su asignatura es crucial para la motivación de los estudiantes. Si un profesor se convierte en aburrido o apático con su asignatura, los estudiantes también lo harán. El mejor estusiasmo del profesor es el que se deriva de su confianza, su identificación con los contenidos y un auténtico placer por enseñar.

  10. Trabajar las fortalezas e intereses de los estudiantes. Explicar cómo el contenido de la asignatura ayudará a los objetivos educacionales, profesionales o personales de los estudiantes. Partir del intereses reales de estos que sean vinculables con el aprendizaje.

  11. Cuando sea posible, dar alguna posibilidad de elección a los estudiantes sobre lo que están estudiando. En materia de trabajos, materiales... unidades alternativas.. no sobre los exámenes, pero sí en todo aquello que refuerce su corresponsabilidad.

  12. Incrementar progresivamente la dificultad del material de la asignatura . Es interesante dar opòrtunidades a los estudiantes para que tengan éxito al principio del primer trimestre del curso o semestre. Una vez que hayan triunfado, es más fácil incrementar la dificultad o el nivel de forma progresiva.

  13. Variar los métodos de enseñanza. La variedad ayuda a despertar la participación y la motivación de los estudiantes en la asignatura. Se puede romper la rutina de muchas formas: cambio de papeles, debates, tormentas de ideas, discusiones, demostraciones, casos de estudio, presentaciones audiovisuales, invitados externos, trabajo en grupos pequeños...

  14. Poner énfasis en el dominio y aprendizaje, más que en las notas. Los investigadores recomiendan dejar de poner énfasis en las calificaciones eliminando sistemas complejos de evaluación; también desaconsejan el uso de las calificaciones para comportamientos no académicos (ej. asistencia o no a clase). En vez de esto, valorar trabajos escritos, valorar la satisfación personal de trabajos realizados, y ayudar a los estudiantes a medir sus progresos.

  15. Diseñar exámenes que fomenten el tipo de aprendizaje que se desea que los alumnos asuman. Si, por ejemplo, los exámenes se basan en memorizar detalles los estudiantes se centrarán en memorizarlos; si en cambio sus exámenes ponen énfasis en sintetizar y evaluar la información, los estudiantes se motivarán para poner el practica estas habilidades cuando estudien la asignatura.

  16. Evitar utilizar las calificaciones como amenazas. Aludir o amenzar con bajas notas, puede provocar algunos estudiantes a trabajar duro, pero en otros estudiantes pueden provocar desde el deseo de autoengañarse o darse excusas para retrasar el trabajo hasta otros comportamientos contraproducentes.

  17. Dar feedback a los estudiantes tan pronto como sea posible. Devuelva los exámenes y los trabajos corregidos lo antes posible y reconozca y recompense pública e inmediatamente los éxitos logrados. Dé indicaciones sobre lo bien que lo han hecho o cómo pueden mejorar.

  18. Recompensar el éxito. Tanto los comentarios positivos o negativos influyen en la motivación, pero los investigadores indican que los estudiantes reaccionan mejor a través de un feedback positivo y el éxito. Alabar ayuda a construir la confianza, capacidad y autoestima de los estudiantes. Es importante reconocer los esfuerzos, incluso si los resultados no son buenos, trasmitiendo la confianza del profesor de que serán buenos en el futuro.

  19. Presentar a los estudiantes el buen trabajo hecho por sus compañeros. Compartir con la clase ideas, conocimientos y habilidades de estudiantes individuales con el resto de la clase. Por ejemplo, copias de los mejores trabajos o exámenes... Se trata de propiciar "habilmente" un reconocimiento social del trabajo bien hecho en su entorno de compañeros y relaciones.

  20. Ser específico, cuando se haga una crítica negativa, nunca a la persona. Las críticas tienen efectos poderosos y pueden conducir a una atmósfera negativa en la clase. Cada vez que se identifique una debilidad en los estudiantes, déje claro que se trata sobre una determinada función o tarea, nunca al estudiante como persona. Combinar un comentario negativo con otros aspectos en los cuales el estudiante haya tenido resultados positivos.

  21. Evitar comentarios degradantes en la clase. Muchos estudiantes pueden estar ansiosos por su rendimiento o habilidades en la clase. Hay que ser sensible en la forma en la que se expresa o se comentan tales temas a efectos de evitar observaciones o comentarios en los que el profesor muestre falta de interés o que "pasen" de sus sentimientos relacionados con su fracaso.

  22. Evitar ceder y dar las "soluciones" a los estudiantes para las tareas de trabajo o deberes para casa. Hay que lograr que piensen por sí mismos y dirigir la ayuda por otros caminos (ayudarles a construir lo que ya saben, propiciarles aproximaciones al problema, posibles pasos...). Hay que lograr métodos que ayuden a los estudiantes a que experimenten el sentimiento y confianza derivada de que lo pueden lograr por sí mismos, lo que incrementará su motivación para aprender.

  23. Asignar la lectura de los temas al menos dos sesiones antes de que sea analizada en clase. Dar a los estudiantes un tiempo sobrado para preparar y atraer su curiosidad hacia los materiales de lectura.. "Este ...es uno de mis favoritos... y estaré muy interesado en conocer vuestra opinión".

  24. Asignar preguntas de estudio. Al hacer preguntas se contribuirá a incentivar a los alumnos a buscar respuestas en lo que leen o estudian.

  25. Permitir breves chuletas que pueden ser utilizadas en los exámenes. Especialmente si estas chuletas incentivan la lectura, el trabajo y el estudio bien hecho. Un profesor en física daba la oportunidad de escribir en cada clase en una tarjeta 3x5: un resumen, definiciones, ideas claves u otros materiales derivados de la lectura, que los estudiantes entregaban finalmente al profesor con su nombre. Esa tarjeta se daba nuevamente al estudiante para complementarla pasados unos días para añadieran materiales que consideraran importantes y era nuevamente devuelta al profesor. Por último, el profesor entregaba a los estudiantes dichas tarjetas el día del examen, durante la realización del mismo. El resultado no se hizo esperar. El profesor notó que el porcentaje de alumnos que completaban sus lecturas pasó del 10 al 90%. Y los estudiantes especialmente valoraban estas "tarjetas de superviviencia" como una gran ayuda.

  26. Utilizar el tiempo de clase como tiempo de lectura. Si el profesor está tratando de provocar un debate y se percata de que pocos estudiantes han completado las lecturas asignadas, hay que considerar la posibilidad de que los alumnos completen su lectura en tiempo de clase, silenciosamente o en voz alta y discutiendo aquellos puntos importantes.

  27. Asignar trabajos escritos a aquellos estudiantes que no completen sus lecturas. Los que no las han completado al principio de la clase se le asigna un trabajo escrito y no participan en la dicusión de clase. El trabajo escrito no es evaluado, sino simplemente reconocido. Con estos métodos se puede ir logrando que los estudiantes finalmente cumplan con las lecturas programadas durante el curso.

martes, 8 de marzo de 2011

EL NEGOCIADO DE LOS LIBROS DESECHABLES

Se puesto en medio del ojo de la tormenta un práctica lucrativa muy conocida por todos y sin embargo, poco debatida en el medio político, pareciera que la educación es un tema presidencial que se solucionaría prometiendo elevar la inversión del PBI sin tocar los viejos cimientos deteriorados que hoy la sostienen tambaleante.

No es la primera vez que se hacen estas denuncias, vender y comercializar libros en las escuelas y colegios del país ha sido siempre un dolor de cabeza para los agobiados padres de familia quienes en al inicio de cada año deben hacer verdaderos esfuerzos para conseguir el dinero que pague a la Editorial su precio de venta y además -indebidamente- el porcentaje de inmoral de ganancia obtenida por los conductores de las propias instituciones educativas.

Es inaceptable que un promotor de educación, entiéndase dueño de un centro que imparte educación, o un director de institución educativa pública, engañe a los padres de familia aprovechándose de su buena fe para hacerles creer que un libro de tal o cual editorial es el mejor y que con ello sus hijos aprenderán más.

Estafan y roban descaradamente al vender un libro con sobreprecio. Desdicen su condición docente al sacrificar la ética por el lucro fácil.

Y frente a esto las autoridades reaccionan tibiamente trasladando la iniciativa a INDECOPI para sancionar la práctica comercial amañada, pero....y que hay del servicio educativo que prestan los concesionarios de la educación privada? Puede quedar impune un hecho comprobable y evidente ? Creemos que hay que poner mayor firmeza y disponer las medidas necesarias que frenen de inmediato este innoble negociado que se hace con la niñez y la juventud del país.

viernes, 4 de marzo de 2011

EL TERMINO CULTURA EN ORTEGA Y GASSET


“Cultura es lo que queda después de que todo ya se sabe”
Ortega y Gasset

Si existe alguna palabra de uso diario, y sobre cuya definición no hay acuerdo desde cualquier análisis que se considere, es el término "cultura". Bajo su conceptualización se engloban tantas como autores, que procedentes desde el genérico campo de las ciencias humanas, han intentado aproximarse a una "solución".

El término cultura en Ortega y Gasset.

En el ensayo Misión de la Universidad (1930), Ortega y Gasset define el concepto de cultura como "el sistema de ideas vivas que cada tiempo posee. Mejor: el sistema de ideas desde las cuales el tiempo vive. Porque no hay remedio ni evasión posible: el hombre vive siempre desde unas ideas determinadas, que constituyen el suelo donde apoya su existencia".

En el libro En torno a Galileo (1933) afirma: "La cultura no es sino la interpretación que el hombre da a su vida, la serie de soluciones, más o menos satisfactorias, que inventa para obviar a sus problemas y necesidades vitales. Entiéndase bajo estos vocablos los de orden material que los llamados espirituales".

Posteriormente, y en el mismo libro refiere: :.. "el hombre primitivo, perdido en su áspera circunstancia elemental, reacciona creando un repertorio de actitudes que le representan la solución de los problemas planteados por aquella: este repertorio de soluciones es la cultura.

Al avanzar la cultura y desarrollarse llega a una estación en que: 1º, las nociones sobre las cosas y las normas de conducta se han hecho demasiado complicadas y desbordan la capacidad intelectual y moral del hombre...; 2º, esas nociones pierden vivacidad y evidencia sobre los hombres que tienen que usarlas; y 3º, la cultura no queda repartida con orgánica espontaneidad y precisión en los grupos sociales que la van creando, y, por tanto, en la proporción en que la entienden y sienten, sino que esa cultura superior es inyectada como mecánicamente"...

En Teoría de Andalucía y otros ensayos,1942, escribe: ... "la cultura no consiste en otra cosa que en hallar una ecuación con que resolvamos el problema de la vida. Pero el problema de la vida se puede plantear de dos maneras distintas. Si por vida entendemos una existencia de máxima intensidad, la ecuación nos obligará a un esfuerzo máximo.... aspiremos solo a una vita mínima: entonces, con un mínimo esfuerzo, obtendremos una ecuación tan perfecta como la del pueblo más hazañoso".

En Meditación de Europa (1949) redactada en sus últimos años, aporta Ortega sus reflexiones sobre el concepto de nación, y entre sus numerosas referencias al término cultura señalar: " Desde la escuela historocista alemana la palabra "cultura" degenera semánticamente, llegando a significar el modo de ser de un pueblo, cualquiera que sea ese modo. Conviene recordar que antes "cultura" significaba solo un modo único y ejemplar de humanidad."

A continuación, apunta lo que entiende por "modo": ... "Lo característico de la idea de Nación estriba en que todas esas formas de vida inerciales (su lengua materna, su tradición religiosa y heroica, sus costumbres inveteradas, su modo peculiar de sentir, pensar, gozar) fueron desarrollándose y enriqueciéndose hasta constituir un modo integral de ser hombre. Ser inglés, francés o español. Este modo afecta a todas las dimensiones de lo humano – religión, poesía, arte, economía, política, amor, dolor, placer -, la penetra, impregna y modifica. Ahora bien, como frente a esos modos particulares de ser hombre no hay un hombre absoluto, un hombre sin modo, cada europeo llegó a sentir que su modo "nacional" de humanidad no solo era un arrastre inicial del pasado, sino algo que debía ser en el futuro, que merecía ser. La vis a tergo de la tradicionalidad se tornó a la vez en ejemplaridad, por tanto, en vis proiectiva, en fuerza creadora de futuro, en ideal de vida hacia el porvenir."


De: Libros en red

miércoles, 2 de marzo de 2011

LA ADOLESCENCIA ...ESA DIFICIL ETAPA


Adolescencia: marcar los límites
por :María Jesús Álava Reyes y Silvia Álava Sordo

El adolescente se debate entre su rebeldía y la autoridad que sigue necesitando. Precisa de límites, aunque le cueste asumirlos. Por eso los padres deben mostrarse firmes y seguros frente a sus hijos en esta difícil edad. En los casos más conflictivos será necesaria la ayuda de profesionales.

Con el inicio de la pubertad, las hormonas van a adquirir un gran protagonismo, de tal forma que en muchas ocasiones serán las que tomen las riendas del comportamiento del adolescente, en el que, también, se observan las siguientes características:

• Surge una falta de reconocimiento de la autoridad, que les hace cuestionarse todas las normas establecidas por los adultos.
• La familia pierde protagonismo a favor del grupo de los amigos.
• En muchas ocasiones las decisiones y preferencias personales las sacrifican en función de lo que el grupo tolere

Reglas de oro a seguir

• A los adolescentes les cuesta asumir los límites que tanto necesitan y que los ayudan a situarse y a conocer cuáles son sus derechos y sus obligaciones.
• Los padres y los adultos, en general, deberán enfrentarse a situaciones poco agradables, en las que su seguridad será clave para ayudar al adolescente a superar estas crisis.
• No olvidemos que los niños aprenden por modelos, los padres somos sus modelos a imitar, por eso hay que mostrarse seguros.
• Potenciar sus habilidades y mitigar sus defectos. No centrarse solo en los éxitos y fracasos escolares, pues éstos serán una parte de sus vidas, pero no lo único importante.
• Los padres seguirán la misma línea, no contradiciéndose uno al otro y mucho menos delante del adolescente.
• En casos de rabieta o estallido, no es el momento de dialogar con ellos: el lenguaje verbal no sirve de nada.

Ayuda en situaciones extremas

Cuando la situación es extrema, sí que ayuda saber que estamos actuando de forma correcta. El adolescente de hoy dará paso al joven de mañana, y éste será menos impetuoso, menos hiriente, menos provocador, más humano, más justo y más cercano.

Y es que los adolescentes verdaderamente no lo tienen fácil. En muchos casos encontramos chicos y chicas que nos dicen que no saben como evitar “saltar y estallar a la mínima”, que les encantaría controlarse pero que no pueden. No lo hacen para fastidiarnos, sino porque no pueden evitarlo.

Errores más frecuentes

• Podemos negociar las normas a seguir, pero nunca debemos dejar que sean ellos los que marquen los límites.
• No hay que ceder para evitar males mayores pensando que esto pasará con el tiempo.
• Los chicos pueden sentir miedo por tenerlo todo demasiado fácil.
• Debemos dejarles que desarrollen sus propias estrategias, que resuelvan sus problemas y conflictos. Pero siempre debemos estar ahí, en un segundo plano.